En sus papeles, cuadernos y diarios; Kafka dejó una gran cantidad de textos breves sobre la vida y la muerte, la esperanza y la incertidumbre, la verdad y lo verosímil: pensamientos sobre el sentido.

En 1917, tras haber sido diagnosticado de tuberculosis pulmonar, solicita una licencia en el Instituto de Seguros y, por primera vez en su vida, se dedica por entero a aquello que, según él, lo justificaba: escribir.

Entre 1918 y 1924, año de su muerte, escribe, revisa y recopila esos textos, le asigna un orden, los enumera y los deja casi listo para una hipotética edición. De esa labor, surgen los Aforismos de Zürau también conocidos como Legajos de aforismos. Primavera 1918.

5. A partir de cierto punto ya no hay vuelta atrás. Hay que llegar a ese punto.

14. Si anduvieses por una llanura con la firme intención de avanzar, y pese a ello retrocedieras, tu situación sería desesperada; pero como estás trepando por una pendiente escarpada, más o menos tan escarpada como lo eres tú mismo visto desde el suelo, los retrocesos solo pueden deberse a las características del terreno, así que no debes desesperar.

Estos suelen ser leídos para confirmar los preconceptos que se tienen sobre el escritor. Harold Bloom, por ejemplo, los señaló como lo más importante de la obra de Kafka, pues consideraba que en toda ella no había hecho otra cosa más que explorar la espiritualidad judía.

Confesión y mentira son lo mismo. Para poder confesar se miente. Lo que uno es no puede expresarse, precisamente por ser lo que uno es; solo se puede comunicar lo que uno no es, es decir, la mentira. Únicamente en el coro puede haber cierta verdad.

Así también se lo leyó para decir que se trataba de un autor gnóstico, hereje o escéptico. Sin dudas, con sus textos "se opone a ser fijado por sus semejantes".

El arte vuela en torno a la verdad, pero con la resuelta intención de no quemarse. Su capacidad consiste en encontrar en el oscuro vacío un lugar, no perceptible anteriormente, donde se pueda capturar de lleno el rayo de luz.

Los puntos de vista del arte y de la vida son diferentes incluso en el mismo artista.

Esta edición que al cuidado de Jordi Llovet, se divide en tres secciones. La primera incluye los aforismos seleccionados por Kafka; la segunda, una serie de textos dispersos que, por alguna razón, dejó afuera de esa selección; y la tercera contiene una serie de pensamientos extraídos de sus Diarios y que tienen la particularidad de referirse a una tercera persona gramatical (él). De ahí su título: Él, anotaciones del año 1920.

Lo más cruel de la muerte: un final aparente provoca un dolor verdadero.

Por último, cabe resaltar la labor de Jordi Llovet quien en un breve y preciso prólogo y advertencia, presenta la historia textual de cada uno de las secciones previamente mencionadas.

Escribir es como una forma de orar.

Es, sin duda, un libro atractivo para quien se encuentra interesado en la escritura o, incluso, en la personalidad pública de Kafka.

Franz Kafka, Aforismos. DeBolsillo, 2018, 128 páginas. Traducción: Adan Kovacsics, Joan Parra Contreras, Andrés Sánchez Pascual. Prólogo: Jordi Llovet. Diseño: Peter Mendelsund. Precio: $599.-